¿Qué hago cuando me falta la fe?

Una de las batallas más grandes que hay en el campo misionero, es el tema de la fe.

Y tal vez te estarás preguntando: ¿fe? pero... ¿qué no se supone que son cristianos y confían en Dios? ¿qué no se supone que sin fe es imposible agradar a Dios? ¿los misioneros pueden lidiar con algo así?

La respuesta a todas las preguntas anteriores es Si. Cómo creyentes sabemos en quién confiamos y a quién le hemos creído al dejar nuestra familia, amigos y todo lo conocido para servir en otro lugar que no es nuestro hogar.

También es cierto que por fe es que todo es posible. Qué sin ella es prácticamente imposible tener una relación personal con Dios y creer que Él existe.

Y también es cierto que la fe es el ingrediente secreto de todo lo que hacemos. Requieres fe en todo lo que quieres hacer para el Reino: dejar tu trabajo para ir a servir del otro lado del mundo, dar tu diezmo cuando ves que la despensa está casi vacía, sembrar en la vida de alguien cuando sabes que todavía hay gastos del mes por pagar, dejar a tu familia para ir detrás de un propósito eterno. Es una vida de fe real.

Y de eso queremos hablar contigo. Cada persona que forma parte de Jucum Morelia, ha experimentado a Dios de una forma extraordinaria. Ha visto la provisión sobrenatural en momentos de crisis. Ha visto deudas cancelarse. Ha visto a su familia ser redimida. Ha visto vidas transformadas por el hecho de haber dicho que sí a Dios. Cada uno de ellos, sabe perfectamente quién es Él porque lo ha experimentado y estamos seguros que tú también.

Pero aquí viene una pregunta importante: ¿qué hago cuando me falta la fe? Sé quién es Dios. Confío en Él. Siempre ha provisto todo lo que necesito. Nunca me ha fallado. Sin embargo, aveces llega el sentimiento de pensar que esta vez no lo lograré. Llega acompañado de la duda y el deseo de abortar la misión. ¿qué hago cuando mi fe se hace pequeña comparada al reto tan grande que tengo por delante?

Cómo seres humanos llenos de miedos e inseguridades, nuestra respuesta inmediata es el miedo, la desesperación, el reclamo, la frustración y la desesperanza. Y esto no es la excepción en el campo misionero. La duda y el desánimo también llegan a nuestras vidas. La desesperanza también nos invita a poner la mirada en algo o alguien que no es Jesús. Pero Dios siempre llega a recordarnos, que si Él lo hizo en el pasado, lo hará hoy otra vez!!!

Por eso, hoy queremos animarte a tomar la decisión de creerle a Dios en hacer lo que sea que Él esté poniendo en tu corazón. Tomar el paso de fe en obediencia es difícil, pero como siempre, Dios sabe todo lo que necesitamos y Él si puede ver la imagen completa de nuestro futuro. Si lo ha hecho en nosotros, estamos seguros que puede hacerlo en ti también.

No dejes que el miedo o la duda, te roben la oportunidad de experimentar a Dios de una forma más íntima. Toma el paso de fe y deja que Dios se encargue del resto. Te prometemos que verás muchos milagros suceder.

Quizá tu próximo paso es hacer una EDE (Escuela de Discipulado y Entrenamiento) aquí en Jucum Morelia.

!Sólo házlo! ¿Por qué tienes tanto miedo?

Marcos 4:35-41

!Sólo házlo! ¿Por qué tienes tanto miedo?

“Cuando Jesús se despertó, reprendió al viento y dijo a las olas: «¡Silencio! ¡Cálmense!». De repente, el viento se detuvo y hubo una gran calma. Luego él les preguntó: «¿Por qué tienen miedo? ¿Todavía no tienen fe?».”

‭‭Marcos‬ ‭4‬:‭39‬-‭40‬ ‭NTV‬‬

Previous
Previous

Hope that endures

Next
Next

What do I do when I lack faith?